EIST en la Educación secundaria
La Enseñanza integrada de ciencia y tecnología (EIST) es un proyecto que trata de reformar la educación de la ciencia y la tecnología.
Unas 160 escuelas voluntarias, asesoradas por la Academia de ciencias y la Academia de tecnologías, ponen en práctica la estrategia de indagación y el estímulo del espíritu científico.
Los diez principios de la enseñanza integrada de ciencia y tecnología (en la estela de los principios de La main à la pâte)
- Los alumnos del primer ciclo de la enseñanza secundaria llevan a cabo sus indagaciones a partir de objetos, fenómenos o situaciones del entorno natural o tecnológico accesibles, propensos a estimular la curiosidad y el interés.
- Durante sus indagaciones, los alumnos razonan, intercambian, comparten ideas, experimentan, comparan resultados, debaten haciendo uso de espíritu crítico; así construyen gradualmente sus conocimientos antes de apuntarlos con el maestro, respetando las necesidades de rigor intelectual.
- Las situaciones de aprendizaje van incluidas en secuencias que respetan la progresividad del proceso de aprendizaje, en el marco general de los programas oficiales de tecnología, física, química y ciencias de la vida y de la tierra. Los alumnos disponen de una total libertad, con el asesoramiento de un profesor si fuese necesario. Las asignaturas no han de respetar un orden preconcebido de prioridad.
- Por lo menos 3 horas y media por semana y por alumno han de ser dedicadas a un tema durante varias semanas. La escuela supervisa la continuidad de las actividades y de los métodos durante los primeros dos años de la secundaria. La coherencia de las ciencias y de la tecnología cobra forma con la variedad de disciplinas y métodos movilizados durante las indagaciones.
- Cada alumno constituye un cuaderno de indagación (o de experimentación) con sus propios apuntes. Utiliza las técnicas de comunicación tradicionales y modernas, como el ordenador por ejemplo.
- El objetivo es la apropiación progresiva o el reforzamiento por parte de los alumnos de los conceptos y de las técnicas operativas junto con el mejoramiento del lenguaje utilizado y la calidad de la expresión tanto escrita como oral.
- Unas evaluaciones adecuadas ayudan a los alumnos y los adultos (maestros, familias) a medir los progresos realizados.
- Los asociados científicos, técnicos o ingenieros ponen sus competencias a disposición de los alumnos y de los maestros.
- Una estructura académica constituida por maestros, formadores y evaluadores acompaña esta dinámica.
- Un sitio web agrupa los diferentes recursos y ofrece a los maestros una plataforma para intercambiar y dialogar.